sábado, 20 de marzo de 2021

New Amsterdam

 

Foto de Online Marketing.

En modo pandemia he visto una cantidad de series y películas de distinto género, en particular  una que llamó mi atención es New Ámsterdam. El tráiler fue tan distinto a otras series que he visto, en comparación a otras que también son de médicos. 

A medida que avanzaba los capítulos me di cuenta del enorme cambio que anhelaba realizar el personaje principal, el nuevo director médico Max Goodwin, en tal hospital público partiendo por lo médicos, él buscaba encontrar la vocación que habían perdido, más aún si la profesión la realizaban solo por lo monetario. Aunque no descarto la idea que no todos son iguales, sabiendo que el sistema tiene que atender un lapso de muchos pacientes, eso se vuelve rutinario y se va perdiendo la vocación.

Recordé a un médico con el que empecé a atenderme por mi hipotiroidismo. Antes que tocara mi turno siempre había gente afuera esperándolo y pensé ¿Este médico no alcanzará a recetar los medicamentos? ¿Por qué siempre sus pacientes golpean la puerta cuando está con otro paciente? Llegando mi turno el médico se presenta y me explica su método de trabajo, el cual me encantó, partiendo por explicar con manzanitas mi diagnóstico, mi alimentación día a día y más aún que cuando tuviera una duda o inquietud asistiera a verlo cuando no podría encontrar una hora con él, pero debía tener paciencia, si él se encontraba atendiendo  ¡Ahí entendí su vocación!

Querido jovencito, cuando estés enfermo, ruégale a  Dios que te dé la salud. No peques ni de pensamiento, sino apártate de la maldad. Preséntale a Dios ofrendas de acuerdo con tus posibilidades, pero no rechaces al medico; al contrario, déjalo actuar, pues también a  él lo necesitas. En algunos casos, tu salud  está en sus manos; en otros casos, él mismo le pedirá a Dios que te devuelva la  salud. Es un pecado contra Dios no dejar que  el médico actúe.
Eclesiastés 38: 8-15 | Reina Valera 1960 (RVR 1960)

Siguiendo el hilo de la serie, lo curioso fue ver a un personaje llamado la Doctora Helen Sharpe, una oncóloga conocida por los medios televisivos por su arda lucha en contra el cáncer. Mayormente pasaba en los set de televisión que en el mismo hospital. Esto fue uno de los cambios que solicitó el personaje principal, Max Goodwin, que ella volviera atender pacientes, algo que no tenia pensado volver a realizar la Doctora Sharpe, porque se dio  cuenta que era más fácil lidiar en un set de televisión, que ver a sus paciente sufrir y ser empática.

Jesús  recorría toda la región de Galilea. Enseñaba en las sinagogas, anunciaba las buenas noticias del reino de Dios y sanaba a todos los que estaban enfermos. Jesús se hizo muy famosos en toda la región de Siria. La gente le traía personas que sufrían dolores y enfermedades, o que tenían demonios. También le traían a los que sufrían de ataques o que no podrían caminar ni moverse, y a  todos ellos los sanó. 
Mateo 4:23-24   Reina Valera 1960 (RVR 1960)

En esta serie también se exponen las creencias de distintas culturas religiosas como la del Doctor Reynolds, encargado del departamento de cardiología, quien también realiza una plegaria y un ritual antes de cada operación, al igual que algunos pacientes. En uno de los capítulos al interior del hospital asistieron un grupo de creyentes, durante la jornada oraban por todos los enfermos que se encontraban ahí, el Doctor Max les pide orar por un paciente  por lo complejo de su enfermedad. El líder del grupo de creyentes le explica que toda persona puede orar, solo tiene que creer. Por primera vez Max ora y pide por la salud del joven.

Pero clamaron a Jehová en su angustia, y los libró de sus aflicciones. Envió su palabra, y los sanó, y los libro de su ruina.
Salmo 107: 19-20  |  Reina Valera 1960 (RVR 1960)

Acordémonos que Jesús nos mostró y enseñó el ejemplo de vida a seguir, dio su vida por nosotros, nos enseñó a orar por el afligido, por el desamparado, por el enfermo, ayudar al desprotegido como lo hizo el personaje Max, auxilio a unas personas extranjeras a volver a su país luego de la enfermedad terminal de la mujer, le dio techo a un anciano y él estaba tan acostumbrado a vivir en la calle que nuevamente volvía al hospital porque se sentía acompañado.

Claramente es una serie de ficción, muy lejana a la realidad, que nos deja una gran enseñanza.

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